Apizaco, Tlaxcala. La tranquilidad el pasado fin de semana se rompió abruptamente cuando tres sujetos armados irrumpieron en la gasolinera Servi Fácil, ubicada sobre la carretera México-Veracruz, sometiendo con brutalidad a los empleados y llevándose un botín aún no cuantificado.
El Servicio de Emergencias 911 recibió el alarmante reporte: los trabajadores habían sido amarrados, golpeados y despojados de sus pertenencias, mientras los delincuentes escapaban en una motocicleta a toda velocidad. Al llegar al lugar, policías de Apizaco encontraron a Kevin N., de 24 años, visiblemente alterado, quien relató los minutos de terror vividos dentro del establecimiento.
Según el testimonio, dos de los asaltantes, vestidos con ropa oscura y armados con pistolas, los obligaron a entrar a una bodega donde ya estaban retenidos otros tres empleados: Suleyma N., de 34 años; Juana N., de 25; y Horacio N., de 28. Allí, los amarraron y golpearon al jefe de la gasolinera antes de apoderarse del dinero en efectivo, teléfonos y carteras.
Los agresores escaparon sin dejar rastro. Aunque la gasolinera cuenta con un sistema de videovigilancia, el acceso a las grabaciones depende de un sistema central ubicado en la Ciudad de México, lo que frustró cualquier intento inmediato de identificar a los delincuentes.
Elementos de la policía municipal de Apizaco, la Marina y la Policía de Investigación realizaron un operativo en la zona, pero hasta el momento no hay detenidos. El ataque se suma a la creciente ola de violencia en la región, dejando a comerciantes y ciudadanos con una sensación de inseguridad creciente y con más preguntas que respuestas.