Tlaxcala, Tlax.- La ciudadanía de Tlaxcala manifiesta una creciente preocupación por la inseguridad, a pesar de los informes oficiales que insisten en una supuesta baja en los delitos. Robos a casa habitación, delitos patrimoniales y el aumento del consumo de drogas entre jóvenes son algunos de los problemas que mantienen en alerta a la población.
La estrategia de seguridad: cifras sin resultados visibles
El secretario de Seguridad Ciudadana, Alberto Perea Marrufo, defiende su gestión basándose en los registros del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), que posicionan a Tlaxcala entre las entidades con menor número de delitos denunciados.
Sin embargo, organizaciones civiles cuestionan estos datos, argumentando que no reflejan una disminución real en la delincuencia, sino una profunda desconfianza de la ciudadanía en las autoridades, lo que provoca que muchas víctimas prefieran no denunciar.
Falta de respuesta y dudas sobre la continuidad de Perea Marrufo
Mientras tanto, el titular de la SSC evita hablar sobre los rumores de su posible salida del cargo, limitándose a decir que “los números hablan por sí solos”.
Pero lo que la ciudadanía observa diariamente es muy diferente: una estrategia que no ofrece resultados tangibles, respuestas tardías ante emergencias y una sensación constante de vulnerabilidad.
Una brecha entre cifras oficiales y la realidad social
Aunque los reportes institucionales presentan un panorama optimista, la percepción ciudadana evidencia un deterioro en la seguridad pública. Los tlaxcaltecas reclaman acciones efectivas y una política de seguridad que realmente atienda la problemática cotidiana.
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