Tlaxcala, Tlax.- Apetatitlán enfrenta una creciente ola de inseguridad, con delitos como el robo de motocicletas, vehículos, autopartes, negocios, y robos a casa-habitación. Escuelas y transeúntes también se han convertido en víctimas de los ladrones. La comunidad se siente abandonada, pues las denuncias diarias y reclamos ciudadanos por la falta de seguridad no reciben respuestas adecuadas.
Falta de patrullaje y respuesta del alcalde
En localidades como la Unidad Habitacional Petroquímica, los habitantes han denunciado robos frecuentes de motocicletas y otros objetos valiosos. La falta de rondines policiales ha sido una queja constante, no solo en la cabecera municipal, sino también en otras comunidades de Apetatitlán.
Los vecinos han solicitado de manera urgente al alcalde Ernesto Azaín Ávalos Marbán más presencia policial y patrullajes constantes, especialmente durante la noche. Sin embargo, hasta el momento, el alcalde no ha dado respuesta satisfactoria a estos reclamos, dejando a los ciudadanos en una situación de vulnerabilidad.
El robo de ganado y daños a comerciantes
A esta creciente inseguridad se suman robos de ganado en las áreas rurales y desvalijamientos durante los días de mercado en el parque municipal, lo que afecta directamente a comerciantes y compradores.
Realidad oculta en las comunidades
Pese a la publicidad que promueve el alcalde Azaín Ávalos Marbán en los medios, las comunidades como San Matías Tepetomatitlán, Tecolotla, Belén Atzitzimititlan y Tlatempan siguen sumidas en la pobreza y la inseguridad, sin ver avances en la mejora de su bienestar y seguridad.
La creciente inseguridad en Apetatitlán es un problema urgente. Los robos, la falta de patrullaje y la indiferencia del alcalde generan una crisis de seguridad que afecta a todos los ciudadanos del municipio.