Tlaxcala, Tlax.- Aunque Ixtenco es considerado el último bastión del otomí en Tlaxcala, la lengua Yumhu enfrenta un serio peligro de extinción. De acuerdo con la alcaldesa Aline Lazo Caballero, solo el 1% de la población —alrededor de 80 personas— domina bien esta lengua, y la mayoría son adultos mayores.
“Con mucha tristeza, puedo decir que es aproximadamente el 1% de la población quien realmente habla y domina bien el Yumhu. Generalmente son nuestros adultos mayores”, lamentó la presidenta municipal.
El legado en peligro: solo los mayores lo conservan
Aunque se calcula que unas 800 personas en general conservan el conocimiento básico del Yumhu, solo una décima parte lo habla fluidamente, y la mayoría supera los 60 años. Esta realidad restringe el uso cotidiano de la lengua, afectando su transmisión generacional.
Acciones para el rescate lingüístico
Con el objetivo de preservar y difundir la lengua Yumhu, el Ayuntamiento de Ixtenco, en coordinación con la Secretaría de Cultura, ha impulsado actividades de rescate cultural. Entre estas destacan:
- Creación de videos, cuentos y juegos en otomí
- Clases de Yumhu en la Casa de Cultura
- Materiales didácticos para preescolar y primaria
Estas acciones buscan sembrar el interés por la lengua materna en los niños, promoviendo desde temprana edad el orgullo por su herencia cultural.
El desafío educativo: perder la lengua al avanzar de nivel
Aline Lazo explicó que conforme los jóvenes avanzan en sus estudios, se alejan del uso del Yumhu, principalmente al ingresar a niveles como el bachillerato o la universidad. Esto se debe, en parte, a que el sistema educativo no incluye contenidos que refuercen el uso de lenguas originarias.
“Conforme avanzan en los niveles educativos, cortan su uso, principalmente en la universidad”, explicó.
Preservar la lengua, preservar la identidad
La lengua Yumhu es más que un medio de comunicación; es la memoria viva de Ixtenco y de Tlaxcala. A pesar de los desafíos, las autoridades y promotores culturales trabajan para que las nuevas generaciones redescubran su lengua materna y fortalezcan el vínculo con sus raíces.
Mantener vivo este idioma no es solo una cuestión lingüística, es una defensa del patrimonio, la cultura y la identidad de todo un pueblo.
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