Tlaxcala, Tlax.- En una resolución controvertida, la LXV Legislatura de Tlaxcala decidió no convocar a los secretarios del gobierno estatal a comparecer tras el informe anual de la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros.
Con 19 votos a favor, la mayoría legislativa desechó la propuesta de evaluar públicamente a los titulares de las distintas dependencias del Ejecutivo, lo que generó una fuerte reacción de la oposición.
Oposición denuncia falta de transparencia
Diputados opositores expresaron su inconformidad, señalando que la decisión obstaculiza la transparencia y la rendición de cuentas.
La legisladora Blanca Águila Lima calificó la medida como irresponsable, argumentando que Tlaxcala enfrenta graves problemas de inseguridad y violencia de género, temas que, a su juicio, requieren mayor escrutinio público.
Por su parte, la diputada Laura Flores lamentó que el Congreso no priorizara el derecho de la ciudadanía a estar informada sobre las acciones del gobierno.
Mayoría oficialista cierra filas
A pesar de las críticas, el Congreso optó por respaldar al gobierno estatal, dejando sin respuesta las exigencias de mayor apertura y transparencia. Esta postura ha avivado el debate sobre la importancia de la fiscalización legislativa en la gestión pública.
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