Tlaxcala, Tlax.- Tlaxcala ha logrado un avance significativo en la protección de su patrimonio cultural. Tras años de ser considerada vulnerable al robo de arte sacro, la entidad ahora registra un saldo blanco en este ámbito.
Según José Vicente de la Rosa Herrera, titular del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Tlaxcala, no se han reportado incidentes de tráfico de bienes culturales ni robos de arte sacro, consolidando la seguridad del patrimonio.
Éxito en restauración y preservación histórica
Además, en materia de espacios vandalizados, Tlaxcala también mantiene un saldo blanco, gracias a esfuerzos constantes en la restauración de monumentos históricos. Las técnicas utilizadas incluyen la aplicación de materiales especializados que permiten una limpieza efectiva sin comprometer las pinturas originales.
Ejemplos destacados incluyen edificaciones de los siglos XVI y XIX, como el kiosco del Zócalo y la Fuente histórica, que ahora cuentan con una capa protectora de barniz transparente que resguarda su integridad.
El arte sacro y su vínculo con actividades ilícitas
El robo de arte sacro es una actividad lucrativa que, en algunos casos, ha sido utilizada para financiar al narcotráfico. En la última década, se han registrado más de 200 denuncias en todo el país relacionadas con este delito.
Un modelo de protección ejemplar
El éxito de Tlaxcala en la preservación de su patrimonio cultural se debe a los esfuerzos coordinados entre autoridades locales y el INAH. Este trabajo conjunto ha permitido mantener un entorno seguro para los bienes culturales y posicionar a Tlaxcala como un ejemplo nacional en protección y conservación del patrimonio histórico.
El compromiso de Tlaxcala con la seguridad cultural y su enfoque en la restauración han resultado en un modelo ejemplar, demostrando que el cuidado del patrimonio es posible con esfuerzo y colaboración.
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