Tlaxcala, Tlax.- En los últimos años, Tlaxcala ha dado un salto histórico en materia de adopciones, pasando de registrar apenas entre una y cinco casos al año a concretar 41 adopciones plenamente legalizadas. Este avance no es casualidad, sino el resultado de un trabajo coordinado entre distintas instancias del estado, enfocado en garantizar el derecho de niñas y niños a crecer en una familia.
La presidenta honorífica del SEDIF Tlaxcala, Mariana Espinosa de los Monteros, explicó que este incremento no significa relajar los procesos, sino hacerlos más eficientes y ágiles desde el punto de vista legal. La clave ha sido fortalecer la coordinación con el Poder Judicial y la Fiscalía, lo que ha permitido destrabar procesos jurídicos que antes se prolongaban durante años y mantenían a menores en resguardo institucional sin una definición clara.
Procesos legales más ágiles y acompañamiento constante
Uno de los mayores retos en el tema de adopción es que no todos los menores son legalmente susceptibles de ser adoptados, ya que muchos casos enfrentan juicios complejos o situaciones familiares no resueltas. Sin embargo, hoy existe una colaboración más estrecha entre instituciones, lo que ha acelerado la liberación del estatus legal de las infancias.
Además, una reforma en materia de niñas y niños expósitos ha sido clave. Esta modificación permite que menores abandonados, cuyos familiares no aparecen en un plazo de 60 días, puedan ser considerados para adopción, siempre bajo un estricto marco legal. Esto ha ayudado a reducir tiempos en ciertos casos, aunque se dejó claro que no todos los expedientes aplican a este supuesto.
Espinosa de los Monteros también destacó el trabajo del equipo multidisciplinario de la Procuraduría Estatal de Protección, integrado por personal de trabajo social y psicología. Este equipo acompaña de manera permanente a las familias, evitando que abandonen el proceso por la complejidad de los trámites o la espera.
Resultados que garantizan el derecho a vivir en familia
Actualmente, una persona o familia que cumple con los requisitos puede completar la evaluación en alrededor de tres meses. En este periodo se realizan visitas domiciliarias, entrevistas laborales y valoraciones psicológicas y sociales. Una vez obtenido el certificado de idoneidad, se pasa a la asignación del menor, etapa que requiere nuevamente coordinación institucional.
Hasta ahora, 41 adopciones ya están concluidas, con niñas y niños que cuentan legalmente con nombre y apellidos de sus madres y padres adoptivos. Además, hay otros menores en convivencia preadoptiva, a la espera del último trámite para formalizar su situación.
Finalmente, desde el SEDIF Tlaxcala se reiteró que estos logros reflejan un compromiso real con el bienestar de las infancias, priorizando siempre su derecho a crecer en un entorno familiar, con respeto absoluto a la ley y a cada uno de los procesos.
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