Una broma, en 2022, salió muy mal para un joven, quien, después de señalar que haría explotar el avión donde viajaba, intervino una aeronave tipo caza F-18, que escoltó el transporte de pasajeros. Al final, fue detenido y, tras dos años, enjuiciado en España.
A través de redes sociales compartieron y viralizaron el video del momento en que el avión militar volaba a escasos metros de la aeronave comercial.
Esto, después de que el joven británico enfrentó cargos en un juicio.
¿Qué pasó con el joven que bromeó con explotar un avión?
Apenas, a finales del mes de enero, el joven identificado con el nombre de Aditya Verma tuvo su audiencia nacional.
Lo anterior, por una broma sobre una bomba talibana que compartió con 5 amigos antes de subir en un vuelo de 2022.
Ante el tribunal, dijo que el mensaje compartido a través de Snapchat fue “De camino a explotar un avión, soy un miembro de los talibanes”.
Texto que envió justo antes de en el aeropuerto londinense de Gatwick rumbo a la isla vacacional de Menorca.
Verma, nacido en la India, señaló que la broma se hizo en el contexto de comentarios recurrentes en el chat sobre sus rasgos y tono de piel.
El mensaje lo intercpetaron de algún modo los servicios de seguridad británicos, que alertaron a la Fuerza Aérea de España, que a su vez envió un caza Eurofighter para escoltar el avión.
No encontraron explosivos ni armas, pero Verma terminó detenido al aterrizar, según informó entonces la policía.
An 18-year-old from Britain faces a fine of 100 thousand pounds sterling because of a joke on Snapchat.
— non aesthetic things (@PicturesFoIder) February 14, 2024
Before the flight, the guy joked in a chat with friends that as soon as they boarded the flight, he would blow up the plane.
Since the message was left over Wi-Fi at the… pic.twitter.com/A3Md1vOOUV
Absuelven a joven de cargos de desorden público
El magistrado José Manuel Fernández Prieto dictaminó que los comentarios no constituían delito, al ser en “un ambiente estrictamente privado” y Verma no podía sospechar que el mensaje terminaría interceptado.
El juicio no dejó claro cómo los servicios británicos lograron tener acceso a los mensajes privados de Verma, subrayó el magistrado.
Sugirió que uno de los otros miembros del chat podría haber avisado a la policía, pero si ese hubiera sido el caso, ese otro miembro tendría que ser acusado, no el joven británico.
Los fiscales habían pedido que se impusiera a Verma una multa de 22 mil 500 euros y que pagara 94 mil 800 euros en concepto de daños y perjuicios al Ministerio de Defensa español por el coste del despliegue del caza.
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