En 2016, un joven llamado Francisco Orihuela Martínez, se ganaría el apodo de 'Paco el de las empanadas', esto específicamente después de viralizarse en redes sociales por su particular forma de vender alimentos en la playa de Acapulco, Guerrero.
El video fue tan popular que no sólo llamó la atención de usuarios en internet, sino también de empresarios, como el caso de Arturo Elías Ayub, quien se mostró interesado en explotar el potencial del joven.
En una ocasión anterior, aseguró que Arturo Elías Ayub le ofrecía 400 mil pesos anuales, cantidad que presuntamente no sería lo suficientemente buena como para cambiar la venta de empanadas, donde genera más ingresos.
Ahora, en una entrevista para el podcast Doble G, aseguró que hubo factores que interfirieron en un trato inicial, cuando el fenómeno viral de internet explotó y él era menor de edad, lo cual provocó que no todo quedara en sus manos.
Paco de las empanadas: ¿por qué rechazó a Arturo Díaz Ayub?
Durante el podcast, fue cuestionado acerca de su relación de Arturo Elías Ayub, sobre lo que asegura que nunca ha hablado abiertamente hasta este contenido. Según explica, tiene una buena relación con él hasta el último contacto con él pero los negocios en su momento no fructificaron.
"Era un niño, la decisión no la tomé yo, la tomó la pareja de mi mamá, de no hacer el acercamiento con Arturo Elías Ayub".
Según cuenta, fueron citados en la Ciudad de México para hablar de negocios con Grupo Carso. Según revela, querían vender las empanadas en los restaurantes de Samborns con un código para que, cuando fuera escaneado, Paco saliera dando su plática sobre los productos.
"Íbamos a grabar unos tres o cuatro videos diferentes, todo iba viento en popa pero, en este caso, la persona que le metió freno fue la pareja de mi mamá", relata.
Paco aclaró que, asimismo, nunca hablaron tal cual de una beca para él, y aclaró también que tenían la necesidad de la venta de empanadas, ya que se trataba del ingreso principal de la familia.
"Sí teníamos necesidad porque era nuestro ingreso", explica. "A mí me hubiera encantado en ese momento".
Paco asegura que, sin embargo, posteriormente le mandó un mensaje a Arturo, a quien considera su amigo, recibiendo una respuesta no sólo positiva, sino que amable y cercana. Pero las cosas quedaron ahí y no se han vuelto a hablar, motivo por el que el vendedor no cree que se haya enojado.
"No me arrepiento porque soy feliz", explica. "Nunca dejes de tener proyectos nuevos y actualmente me está yendo bien, gracias a Dios".
Mira la nueva entrevista con Paco, el de la empanadas:
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