Para que los astronautas puedan nutrirse bien durante las misiones al Planeta Rojo, la NASA diseñó un sistema único de alimentos espaciales.
Durante sus años de entrenamiento, los astronautas tienen que sobrellevar condiciones precarias. Entre ellas, acostumbrarse a puntos de gravedad distintos, someterse a pruebas centrífugas, aprender a respirar en entornos con poco oxígeno. Después de superar estos exámenes rigurosos, la NASA finalmente les permite integrarse a sus misiones espaciales.
Uno de los obstáculos a los que los astronautas se enfrentan todos los días es alimentarse fuera del planeta. En condiciones de gravedad cero, cocinar y comer toman una dimensión diferente, que no se resuelve necesariamente con desayunos instantáneos. Para solventar estas necesidades básicas, la NASA diseñó un menú para que las personas puedan comer en Marte. Así son sus nuevos alimentos espaciales.
Un sistema de alimentos fuera de este mundo
El objetivo principal de este proyecto, según el sitio oficial de la agencia, es “Diseñar un sistema de alimentación espacial que proporcione a los astronautas un amplio sustento en misiones largas y distantes“. De esta forma, los equipos de exploración fuera de la Tierra podrán no sólo comer mejor, sino fortalecer su cuerpo con alimentos espaciales que sí les retribuyan an nivel nutricional y energético.
La intención es que, en misiones que impliquen explorar la vida en otros planetas por mano humana, no sólo se tengan alimentos nutritivos, sino que más sabrosos que la comida refrigerada. La investigación estuvo a cargo de científicos en alimentos y bioquímicos nutricionales, que tenían en mente un sistema de alimentación espacial “en cualquier lugar entre la órbita terrestre baja y el Planeta Rojo“.
Al respecto, Grace Douglas, científica principal de Tecnología de Alimentos Avanzada de la NASA en Johnson Space Center, explicó lo siguiente en Houston, We Have A Podcast!, la audioserie de la NASA:
“Si vamos a comenzar a explorar y a ser más independientes de la Tierra, debemos comenzar a comprender cómo producimos los alimentos y no sólo llevarlos con nosotros”.
Este es fuerzo no es nuevo. Por el contrario, la calidad de los alimentos espaciales se ha ido perfeccionado durante décadas. A diferencia de lo que ocurría en el pasado, hoy hay barcos industriales que transportan comida destinada para la Estación Espacial Internacional. A pesar de estos avances, los científicos de la NASA aseguran que darle de comer a las personas en el espacio sigue siendo un reto de talla interplanetaria.
¿Cuáles fueron los criterios?
De acuerdo con un artículo publicado en The Journal of Nutrition, se consideraron 8 parámetros. Con base en ellos, el sistema de alimentos espaciales no sólo es efectivo, sino que es resistente a las condiciones fuera de nuestro planeta. Para diseñar las comidas saludables en el ‘Menú de Marte‘, estas fueron las consideraciones:
- Seguridad: al momento de cultivarse y cambiar sus condiciones de gravedad, los alimentos deben de ser seguros para los astronautas.
- Estabilidad: los astronautas deben de tener la certeza de que la comida que se lleven a la boca puede durarles varios años, ya que no pueden ‘ir a la tiendita de la esquina’ para comprar nuevos.
- Palatabilidad: la comida tiene que ser sabrosa.
- Nutrición: además de saber ricos y tener una vida útil de años, los alimentos espaciales deben de aportar los nutrientes necesarios para que los astronautas estén fuertes y no se enfermen.
- Recursos mínimos: el agua, energía y volumen de alimentos son escasos abordo de una nave espacial, por lo que las comidas deben de usar lo mínimo indispensable para garantizar que todos puedan comer lo suficiente.
- Variedad: para que no se cansen de comer lo mismo, la NASA diseñó un menú variado de ‘platillos cósmicos’.
- Fiabilidad: el Menú de Marte debe de ser confiable, ya que la vida de los astronautas depende de él.
- De uso fácil: la comida no debe de ser un problema para quienes se aventuren al espacio exterior, por lo que su preparación debe de ser sencilla.
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