Ante la gran noticia de la reapertura del estadio Cuauhtémoc y el anuncio de “estadio lleno” dentro de su actual 30% de capacidad, el Puebla recibe la visita de los Pumas en la penúltima fecha de la fase regular de este Guard1nes 2021, sin duda un cotejo de vital importancia en las aspiraciones de ambas instituciones donde el objetivo en común es la liguilla, aunque los camoteros lo buscan de forma directa mientras que los universitarios a través de la reclasificación.
Las necesidades del técnico de los Pumas, Andrés Lillini, es sumar sin duda esos tres puntos de visita para poder seguir peleando esa doceava posición que les permita jugar el duelo de reclasificación al término de la fase regular. Pero la realidad es que los auriazules dependen hasta cierto punto de lo que hagan equipos como Mazatlán, Querétaro, Pachuca y Xolos, estando estos en el entorno de los 17 y 18 puntos, así como de la onceava y doceava posición.
Por otro lado, el panorama en la Angelópolis con el Puebla luce incierto, pues si bien las buenas actuaciones y el tercer lugar lucen como un logro hasta estos momentos, el perder este penúltimo juego podría significar abandonar la zona de clasificación directa y estar en la repesca como quintos de la tabla, claro esto solo si Monterrey y Santos ganan sus partidos.
El panorama del empate en el Cuauhtémoc tampoco es un escenario tan alentador si se piensa en que Monterrey y Santos pueden sacar los tres puntos de sus partidos, dejando por entendido que a toda costa el técnico Larcamón y sus pupilos deberán salir con todo en busca de la victoria.
En los últimos años, los juegos en el Coloso de Maravillas son favorables para el equipo Camotero, pues desde el Apertura 2017 a la fecha, los Pumas no han podido sacar la victoria de visita sumando en esos tres duelos dos derrotas y un empate, siendo su última victoria en tierras poblanas el 20 de noviembre del 2016 cuando se impusieron con un 3-0.
Crucial y determinante será este duelo donde la afición poblana podrá ver la posible consagración de su equipo como un integrante más de la fiesta grande, o por el contrario observará un conjunto con un futuro incierto que resolverá todo en la última fecha ante Santos.