Los habitantes de Chiapas exigen justicia por el asesinato del padre Marcelo Pérez y demandan paz en una región afectada por violencia vinculada al narcotráfico.
Chiapas.- Cientos de habitantes de comunidades indígenas de Chiapas se movilizaron este domingo para exigir justicia a un mes del asesinato del sacerdote y activista Marcelo Pérez Pérez, mientras demandaban paz ante la escalada de violencia en la región.
El padre José Elías Hernández, de la parroquia San Pedro, destacó la importancia de construir una “paz verdadera” en Chiapas. “No una paz controlada por el crimen o regímenes de grupos delictivos, sino una paz con libertad para los pueblos”, expresó a EFE, instando al Gobierno a pacificar zonas como la Sierra, los Altos y la frontera sur.
La marcha, realizada en Chalchihuitán, reunió a mujeres, hombres, niños y niñas, quienes portaban cruces con listones blancos y fotografías del padre Marcelo. Bajo consignas como “Basta de asesinatos en Chiapas”, el contingente avanzó dos kilómetros al ritmo de música tradicional, expresando su desesperación ante la falta de justicia y el aumento de la violencia.
El sacerdote Marcelo Pérez, de la etnia tzotzil, fue asesinado el 20 de octubre en San Cristóbal de las Casas. Reconocido defensor de los derechos humanos, dedicó su vida a luchar contra la violencia de los cárteles que operan en la frontera sur.
Exigen acción gubernamental
Los manifestantes exigieron la voluntad política de los gobiernos municipal, estatal y federal para frenar la violencia, que ha provocado desplazamientos forzados, extorsiones y marginación en pueblos tzotziles, tzeltales, mam y otras comunidades indígenas.
Líderes comunitarios hicieron un llamado a la unidad y resistencia pacífica, enfatizando que la violencia no solo afecta la seguridad, sino que agrava la histórica marginación de los pueblos originarios.
La situación en Chiapas refleja un problema crítico en México: el avance del narcotráfico y la falta de presencia del Estado en las regiones más vulnerables.