Este informe fue presentado por el gobierno congoleño ante el Comité de la ONU para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (CEDAW) en Ginebra.
República del Congo.- El 27 de enero pasado, en medio de la fuga de más de 3,000 presos de la cárcel central de Goma, ubicada en el noreste de la República Democrática del Congo (RDC), al menos 163 mujeres fueron violadas y luego quemadas vivas, según un informe remitido a EFE por la misión de paz de la ONU en la RDC (Monusco).
Este informe fue presentado por el gobierno congoleño ante el Comité de la ONU para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (CEDAW) en Ginebra.
La ministra congoleña de Derechos Humanos, Chantal Chambu Mwavita, detalló que el ataque del Movimiento 23 de Marzo (M23), grupo rebelde que tomó Goma, permitió la fuga de prisioneros, entre ellos, muchos de los cuales estaban encarcelados por delitos de violencia sexual. Además, se incendió la prisión donde estaban detenidas las mujeres, provocando su asesinato violento.
Destrucción y caos tras la toma de Goma
La ofensiva del M23 también causó proliferación de armas ligeras, saqueos de edificios, y ataques contra mujeres defensoras de derechos humanos. El hospital materno de Goma fue bombardeado, lo que resultó en la muerte de mujeres embarazadas y recientemente paridas. Estos ataques han exacerbado la situación de violencia sexual y los esfuerzos para proteger a las víctimas se han visto severamente socavados.
Contexto del conflicto
El M23, compuesto principalmente por tutsis, retomó Goma después de intensos combates con el Ejército congoleño y sus milicias aliadas. El avance del grupo rebelde ha provocado casi 3,000 muertos y cientos de miles de desplazados, según la ONU. El gobierno de la RDC acusa a Ruanda de apoyar al M23, lo que ha aumentado las tensiones entre ambos países, mientras que Ruanda y el M23 acusan al Ejército congoleño de cooperar con las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR), grupo armado vinculado al genocidio de 1994.
Desde 1998, el este de la RDC ha estado envuelto en un conflicto armado alimentado por milicias rebeldes y el Ejército, a pesar de la presencia de la Monusco.