Bomberos y militares buscaban este martes a sobrevivientes entre los escombros dejados por un fuerte terremoto en el suroeste de China, que mató a al menos 66 personas y provocó numerosos daños en edificios e infraestructuras.
Por el momento se contabilizaron 66 muertos, según el recuento oficial, en la prefectura autónoma tibetana de Garze y el condado vecino de Shimian. Además hay casi 250 heridos y 12 desaparecidos según los balances publicados por los medios estatales.
A total of 66 people have been killed as of 2 pm Tuesday in a 6.8-magnitude #earthquake that jolted #Luding County in southwest China's Sichuan Province, Xinhua reports. pic.twitter.com/Y0xajUDljg
— Beijing Business Today (@BusinessBeijing) September 6, 2022
La televisión pública CCTV informó de más de 11.000 evacuados de las zonas expuestas ahora a deslaves o al derrumbe de edificios.
Igualmente resultaron dañadas al menos siete plantas hidroeléctricas, indicó el ministerio de Recursos Hídricos.
“Todo el mundo está en tiendas de campaña” instaladas por los socorristas y el ejército, explicó por teléfono a AFP Chen Ling, que regenta un restaurante en el pueblo de Moxi, uno de los puntos más afectados.
“Es más seguro estar aquí, porque todavía hay réplicas y las tejas pueden caer fácilmente de los edificios. La electricidad está cortada, aunque nos han puesto generadores”, explica esta mujer, que espera quedarse aquí “probablemente de 10 a 15 días”.
“Todos los edificios presentan un riesgo de derrumbe. Algunos no se han venido abajo pero todos tienen fisuras”, cuenta a AFP Yang Qing, jefa de otro restaurante de Moxi, que pasó la noche en una tienda de campaña.
La televisión CCTV también informó de unas 200 personas bloqueadas en el valle de Hailuogou, una zona muy turística de glaciares y cumbres nevadas situada a más de 2.850 metros de altitud.
El sismo de magnitud 6,6 se produjo el lunes poco antes de las 13 (hora local, 5 GMT) a 10 kilómetros de profundidad en la provincia de Sichuan, según los servicios geológicos estadounidenses.
El epicentro se situó en el condado de Luding, una zona de valles, ríos impetuosos y carreteras estrechas situada en los lindes de la meseta del Tíbet, a unos 200 kilómetros al oeste de la capital provincial Chengdu.
La televisión pública CCTV difundió el martes videos de bomberos sacando el cuerpo magullado y sangriento de una mujer de las ruinas o llevando a un herido en una camilla a través de un puente improvisado por encima de un río.
Algunas rutas, convertidas en ruinas o fracturadas por el terremoto, son impracticables y obligan a los socorristas a atravesar ríos por puentes improvisados o con cables tendidos entre las dos orillas.
Militares movilizados
El gobierno chino indicó el lunes que había enviado un equipo especial para socorrer a la población. Según CCTV son más de 6.500 las personas movilizadas como parte de los equipos de rescate.
El terremoto también sacudió edificios en la capital provincial de Chengdu, donde hay millones de personas confinadas por un brote de covid, y la cercana megaciudad de Chongqing, indicaron residentes locales a AFP.
“Escuché un ruido estruendoso. La casa se sacudía tan fuerte que me desperté inmediatamente”, dijo al medio The Beijing News una mujer apellidada Zheng, del condado de Lu. “La casa de mi hermano se derrumbó. Su casa es vieja, construida hace más de diez años. La mía es nueva, así que la situación es mejor”, explicó.
Después del terremoto, la zona ha registrado al menos 10 réplicas de magnitud 3 o superior, según un último recuento del Centro Chino de Redes Sísmicas.
Previsión de lluvias
El presidente Xi Jinping urgió el lunes por la noche “a hacer todo lo posible para ayudar a las personas afectadas” y “minimizar las pérdidas humanas”, indicó la agencia de prensa oficial Xinhua.
Los servicios meteorológicos alertaron el martes de lluvias en los próximos días en la zona más afectada que pueden complicar las operaciones de socorro.
Los terremotos son relativamente habituales en China, especialmente en Sichuan. En junio, al menos cuatro personas murieron y decenas quedaron heridas por dos terremotos.
Y en 2008, la región fue víctima de un terrible terremoto de magnitud 7,9 en 2008 que causó 87.000 muertos o desaparecidos, entre ellos miles de estudiantes cuyas escuelas se derrumbaron.