En esas elecciones, Nicolás Maduro fue proclamado como presidente reelecto, un resultado que ha sido ampliamente cuestionado tanto por la oposición como por la comunidad internacional.
Estados Unidos de América.- El gobierno de Estados Unidos sancionó a 21 altos funcionarios venezolanos, acusándolos de fraude electoral y represión durante las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024. En esas elecciones, Nicolás Maduro fue proclamado como presidente reelecto, un resultado que ha sido ampliamente cuestionado tanto por la oposición como por la comunidad internacional.
Funcionarios sancionados y cargos
El Departamento del Tesoro de EE.UU. incluyó en su lista de sanciones a figuras clave del régimen de Maduro, como:
- Aníbal Coronado, Ministro de Despacho de la Presidencia.
- Freddy Ñáñez, Ministro de Comunicación.
- Julio García Zerpa, Ministro de Servicios Penitenciarios.
También se impusieron sanciones a varios altos mandos de la Guardia Nacional Bolivariana, el SEBIN (Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional), y la DGCIM (Dirección General de Contrainteligencia Militar). Entre los sancionados destaca Alexis Rodríguez Cabello, director del SEBIN y primo de Diosdado Cabello, y Javier Marcana Tabata, jefe de la DGCIM.
Como consecuencia, se bloquearon los activos de estos funcionarios en Estados Unidos y se prohibieron transacciones financieras con ellos. Hasta la fecha, EE.UU. ha sancionado a más de 150 venezolanos y a diversas entidades del país por su involucramiento en acciones antidemocráticas.
La disputa por la presidencia
A pesar de que el Consejo Nacional Electoral proclamó la reelección de Maduro, la coalición opositora, la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), presentó pruebas que respaldan la victoria de Edmundo González Urrutia. González Urrutia, quien actualmente reside en España, se prepara para regresar a Venezuela el 10 de enero de 2025 y asumir el cargo de presidente, a pesar de la posibilidad de enfrentar detención al llegar.
El reconocimiento internacional de González Urrutia por parte de EE.UU. agrega presión sobre el régimen de Maduro. Esta medida forma parte de los esfuerzos para aislar políticamente al gobierno de Venezuela, mientras se apoya la oposición y se busca una transición democrática en el país.