La Casa Blanca anunció este 5 de marzo que los aranceles del 25% a los automóviles importados desde México y Canadá serán postergados hasta el 2 de abril. La decisión se tomó luego de que el presidente Donald Trump sostuviera conversaciones con los directivos de las principales automotrices de Estados Unidos.
Impacto en la industria automotriz mexicana
México es uno de los mayores exportadores de automóviles a Estados Unidos, con el 80% de su producción dirigida a ese país. El retraso en la aplicación de los aranceles representa un respiro temporal para el sector, que genera más de un millón de empleos.
Empresas como General Motors, Ford y Chrysler (Stellantis) tienen plantas en México, al igual que fabricantes europeos y asiáticos. La medida podría afectar la inversión extranjera y la estabilidad laboral en el sector.
Motivos del retraso y postura de la Casa Blanca
La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, explicó que la prórroga busca evitar que las automotrices estadounidenses enfrenten desventajas económicas inmediatas.
“El presidente Trump ha concedido una exención de un mes a petición de las empresas del T-MEC, para que puedan adaptarse a las nuevas condiciones comerciales”, declaró Leavitt.
Por su parte, el secretario de Comercio de EEUU, Howard Lutnick, adelantó que aunque los aranceles no serán eliminados, la administración podría ajustar su impacto en ciertos sectores.
¿Se eliminarán los aranceles?
Aunque la postergación de los aranceles ofrece un respiro temporal, no hay señales de que la Casa Blanca planee suspender la medida de manera definitiva.
Analistas advierten que si los aranceles entran en vigor el 2 de abril, podrían afectar la competitividad de México en el sector automotriz y provocar despidos masivos.
El panorama sigue siendo incierto para la industria, que espera que el gobierno estadounidense reconsidere la medida antes del vencimiento del plazo.