Fueron 13 palabras que el presidente estadounidense, Joe Biden pronunció al final de un discurso las que causaron una gran polémica y dejan al mandatario francés, Emmanuel Macron, en una situación incómoda para dialogar con Rusia.
“Por el amor de Dios, este hombre no puede permanecer en el poder”, expresó Biden el sábado, en Polonia, tras reunirse con refugiados ucranianos. “Es un carnicero”.
Las palabras no estaban en el guion que llevaba Biden y, como suele suceder cuando el estadounidense “improvisa”, ahora lo han metido en un problema. Tanto, que la Casa Blanca intentó hacer control de daños desde el primer momento, señalando que Biden no se refería a un cambio de régimen, sino a que no puede seguir “empoderado” para seguir con la invasión de Ucrania.
El propio secretario de Estado, Antony Blinken, insistió este domingo en ello. Estados Unidos “no tiene como estrategia un cambio de régimen en Rusia”, subrayo. “La elección del líder ruso le corresponde a los rusos”, acotó.
Pero es a Macron a quien Biden deja en posición más incómoda. Desde el inicio de la invasión, el 24 de febrero, ha sido el presidente galo el que ha buscado acercamientos y sostenido diálogos con Putin para tratar de poner fin al conflicto.
Pero deslices como el del sábado de Biden echan abajo su trabajo. Hace unas semanas, cuando Biden llamó “criminal de guerra” a Putin, nadie le siguió el paso, conscientes de lo riesgoso que puede ser un presidente ruso que siente amenazado su futuro.
A sabiendas del efecto que las palabras de Biden en Polonia pueden provocar, Macron, quien además está en campaña por la reelección, advirtió hoy contra una “escalada en palabras o acciones” si es que se busca poner fin a la guerra.
“No utilizaría este tipo de términos porque sigo hablando con el presidente Putin”, recordó el dirigente galo, quien tiene pendiente un diálogo telefónico con Putin para organizar la evacuación de civiles de Mariupol, una ciudad del sureste de Ucrania asediada por las fuerzas rusas desde hace varias semanas.
Macron ha sostenido una serie de conversaciones, hasta ahora infructuosas, con Putin en aras de lograr el cese el fuego. Pero amenazar, ni que sea veladamente al ruso, con un cambio de régimen, no ayuda.
Francia, enfatizó el ministro francés de Exteriores, Jean-Yves Le Drian, sigue apostando por una solución diplomática. Lo principal ahora es lograr un cese el fuego, indicó, para luego avanzar hacia temas más complicados.
Pero si Putin se siente amenazado, será más difícil lograr algo de él.
Vladimir “Putin considerará esto como una confirmación de lo que ha creído desde el principio”, que Estados Unidos busca sacarlo del poder, advirtió el exdiplomático estadounidense Richard Haass, Biden “hizo más difícil una situación difícil y aún más peligrosa una situación peligrosa”, dijo Haass, quien preside el centro de análisis Consejo de Relaciones Exteriores.
“Esta administración ha hecho todo lo posible para evitar cualquier escalada. No hay mucho más que puedas hacer para escalar que pedir un cambio de régimen”, consideró el senador republicano Jim Risch.
François Heisbourg, del International Institute for Strategic Studies (IISS), dijo que los comentarios de Biden “no son constructivos”. Vía Twitter, lamentó que “la gente siempre habla demasiado”. Y cuestionó: “¿Por qué Joe siente la necesidad de desahogarse cuando sería mejor que se abstuviesen en este momento?”.