Rusia anunció el jueves la homologación de una versión "light" de su vacuna contra el coronavirus, Sputnik V, que se administra en una sola dosis.
Según un comunicado del Fondo ruso de inversiones directas (RDIF), que financia el desarrollo de la vacuna, el Sputnik Light tiene una eficacia del 79.4%, contra un 91.6% de su versión en dos dosis.
Esta homologación fue anunciada paralelamente por los creadores de la vacuna y por la vice primer ministra rusa encargada de la salud, Tatiana Golikova, en una reunión con el presidente Vladimir Putin, transmitida por la televisión.
"La vacuna Sputnik Light está basada en una plataforma de vector adenoviral humano bien estudiada y que se mostró segura y eficaz", añadió la RDIF en un comunicado.
El organismo agregó que el costo de esta versión de la inyección será "globalmente inferior a 10 dólares".Según Alexandre Guintsbourg, el director del centro de investigaciones moscovita Gamaleia, creador de la vacuna original rusa, la Sputnik Light facilitará "una inmunización más rápida de grupos de poblaciones más importantes y reforzará los niveles de inmunidad elevados en quienes ya fueron contaminados".
El director del RDIF, Kirill Dmitriev, también citado en el comunicado, considera que esta versión "reduce considerablemente la probabilidad de casos graves que conducen a una hospitalización".
Según él, el Sputnik V en dos dosis "seguirá siendo la principal fuente de vacunación en Rusia, mientras que el Sputnik Light será exportado".
Rusia se muestra orgullosa de haber sido el primer país que homologó una vacuna contra el coronavirus, desde agosto de 2020, anuncio que entonces fue considerado prematuro en el extranjero, antes del inicio de los ensayos clínicos masivos (fase III) y la publicación de resultados científicos.
En febrero, la prestigiosa revista médica The Lancet consideró que el Sputnik V era eficaz en 91.6%, disipando las dudas sobre su fiabilidad.
A falta de producir suficientes dosis y en espera de consagrar en prioridad su producción a su población, Rusia solo ha suministrado hasta ahora bajas cantidades fuera de su territorio.
A fines de abril, el regulador brasileño Anvisa rechazó homologar la vacuna rusa, asegurando que contenía una versión activa de un virus común que provoca gripes por una anomalía de fabricación.
Los creadores de Sputnik V denunciaron que era un rechazo de naturaleza "política" y amenazaron con presentar denuncia por difamación.
Según el centro Gamaleia, más de 20 millones de personas en el mundo recibieron la primera dosis de Sputnik V.