Por: Cortesía Lula Pineda

Municipios

En riesgo fuente de trabajo de 15 empleados y la pérdida de ahorros de toda una vida de empresario en Plaza Riona

San Andrés Cholula, Pue.- El empresario Armin Brandel, propietario del restaurante de comida italiana Fenotti, se encuentra en una situación crítica que pone en riesgo su negocio, el empleo de 15 trabajadores y la tranquilidad de su familia, debido a las amenazas derivadas de un conflicto en Plaza Riona, donde opera su local.

Brandel denunció públicamente que ha sido objeto de hostigamiento luego de señalar irregularidades en el centro comercial, propiedad de los empresarios Kuri Carballo. En una rueda de prensa, Armin Brandel relató cómo decidió junto con su familia emprender un negocio en México, contactando a los propietarios de la Plaza Riona para arrendar un local, con la firma de un contrato por tres años.

Sin embargo, tras cumplir con los pagos, y realizar una serie de mejoras en el inmueble que fue entredado en obra negra, comenzaron a surgir problemas relacionados con la seguridad en la plaza y con las condiciones de su contrato, lo que ocasionó su frustración. En particular, solicitó mayor seguridad para los clientes de su restaurante debido a los robos frecuentes a vehículos dentro del estacionamiento de la plaza.

El conflicto escaló cuando, en un incidente relacionado con el estacionamiento, Brandel fue acusado erróneamente de agredir a una mujer. Según el empresario, el problema comenzó cuando se le informó que perdería su lugar de estacionamiento en el primer piso de la plaza y lo reubicaron en el sótano, lo que provocó su enojo. A pesar de que existen videos que demuestran el maltrato hacia él por parte de los encargados de la plaza, la acusación de agresión fue formulada sin justificación alguna, y las autoridades de San Andrés Cholula lo liberaron posteriormente al no encontrar pruebas en su contra.

El propietario del restaurante aseguró que esta situación ha afectado profundamente a su familia, ya que invirtió todos sus ahorros en el negocio y ahora se enfrenta a un posible cierre. Explicó que, a pesar de las dificultades, su principal objetivo es concluir el contrato de manera pacífica y evitar la pérdida de empleos para sus colaboradores. Brandel, quien se quedó en México por su esposa, destacó que nunca imaginó enfrentarse a amenazas por ser considerado un "locatario incómodo".

San Andrés Cholula, Pue.- El empresario Armin Brandel, propietario del restaurante de comida italiana Fenotti, se encuentra en una situación crítica que pone en riesgo su negocio, el empleo de 15 trabajadores y la tranquilidad de su familia, debido a las amenazas derivadas de un conflicto en Plaza Riona, donde opera su local

Brandel denunció públicamente que ha sido objeto de hostigamiento luego de señalar irregularidades en el centro comercial, propiedad de los empresarios Kuri Carballo. En una rueda de prensa, Armin Brandel relató cómo decidió junto con su familia emprender un negocio en México, contactando a los propietarios de la Plaza Riona para arrendar un local, con la firma de un contrato por tres años.

Sin embargo, tras cumplir con los pagos, y realizar una serie de mejoras en el inmueble que fue entredado en obra negra, comenzaron a surgir problemas relacionados con la seguridad en la plaza y con las condiciones de su contrato, lo que ocasionó su frustración. En particular, solicitó mayor seguridad para los clientes de su restaurante debido a los robos frecuentes a vehículos dentro del estacionamiento de la plaza.

El conflicto escaló cuando, en un incidente relacionado con el estacionamiento, Brandel fue acusado erróneamente de agredir a una mujer. Según el empresario, el problema comenzó cuando se le informó que perdería su lugar de estacionamiento en el primer piso de la plaza y lo reubicaron en el sótano, lo que provocó su enojo. A pesar de que existen videos que demuestran el maltrato hacia él por parte de los encargados de la plaza, la acusación de agresión fue formulada sin justificación alguna, y las autoridades de San Andrés Cholula lo liberaron posteriormente al no encontrar pruebas en su contra.

El propietario del restaurante aseguró que esta situación ha afectado profundamente a su familia, ya que invirtió todos sus ahorros en el negocio y ahora se enfrenta a un posible cierre. Explicó que, a pesar de las dificultades, su principal objetivo es concluir el contrato de manera pacífica y evitar la pérdida de empleos para sus colaboradores. Brandel, quien se quedó en México por su esposa, destacó que nunca imaginó enfrentarse a amenazas por ser considerado un "locatario incómodo".