Este domingo 14 de noviembre se conmemora el Día Mundial de la Diabetes, una fecha dedicada a recordar la importancia de atender un problema de salud pública que afecta a cerca de 62 millones de personas en todo el continente americano.
Tanto solo en México, de acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), de 1,086,094 defunciones registradas en 2020, el 92.4% se debieron a enfermedades y problemas relacionados con la salud, siendo las tres principales causas: los problemas cardiovasculares con 218,885, COVID-19 con 201,163 y la diabetes con 151,214 casos registrados.
Sin embargo, la preocupación alrededor de dicha enfermedad encendió los focos rojos de la salubridad mexicana, ya que se observó que en las muertes relacionadas al virus SARS-CoV-2, cuatro de cada 10 personas fallecidas eran pacientes diagnosticados con este padecimiento.
A través de las diversas investigaciones que se han iniciado en el territorio nacional, esta patología se ha colocado como uno de los factores de riesgo para desarrollar cuadros graves o muerte por coronavirus.
¿Qué es la diabetes?
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), la diabetes mellitus es una enfermedad crónica que aparece cuando el páncreas no produce suficiente insulina o cuando el organismo no utiliza de forma adecuada la insulina que produce. Este padecimiento se puede presentar de tres formas diferentes:
Diabetes tipo 1: en esta variante no existe la producción de insulina de forma natural, debido a que la glucosa tiene menos posibilidades de ingresar en las células para suministrar energía, lo que provoca que el páncreas pueda agotarse por el esfuerzo excesivo destinado a producir más insulina.
Diabetes tipo 2: a diferencia de la anterior, en ésta hay defectos en la producción de insulina, es decir, se produce poca cantidad o es de mala calidad. Al generarse resistencia a la insulina, el azúcar de la sangre no entra en las células con el fin de ser almacenado como fuente de energía.
Diabetes gestacional: aparece durante el embarazo y el parto; es diagnosticada mediante pruebas prenatales. En caso de presentarse esta variante, tanto la madre como sus hijos corren el riesgo de presentar diabetes tipo 2 en el futuro.
Enfermedad presente en las infancias y jóvenes
Como se puede observar, este delicado padecimiento ha generado preocupación para el Gobierno de México, ya que afecta a más de 12.8 millones de mexicanos, motivo por el cual Infobae México habló con el cirujano bariatra José Antonio Castañeda.
El doctor por la Universidad de Guadalajara detalló cuál es la importancia de trabajar en pro de crear mejores políticas públicas para erradicar una enfermedad que, incluso, ya está afectando a las infancias y adolescencias.
“Aunque la mayoría de los casos se presenta en la edad adulta, cada vez más está afectando a menores de edad, por lo que actualmente más de medio millón de niños viven con esta enfermedad. Esto no sorprende si recordamos que México ocupa el primer lugar del mundo de obesidad infantil con casi cuatro de cada 10 niños con exceso de peso”.
Es por lo anterior que el especialista consideró “funcional” que la Secretaría de Salud (SSa) haya implementado el etiquetado alternativo en alimentos; sin embargo, aseveró que aún falta trabajar en una mejor concientización en los adultos para cuidar la alimentación de las infancias, ya que así se podrá evitar no solo la diabetes, sino disminuir la obesidad y el aumento de las enfermedades cardiovasculares a tan corta edad.
Además, agregó que a las autoridades aún les falta otro paso que dar y es eliminar del mercado aquellos productos que violan las reglas de salubridad, debido a su alto contenido calórico y de grasas saturadas.
Consideró que atendiendo de raíz este tipo de dinámicas en los mercados, se podrán ir disminuyendo los casos de diabetes en el país; a la par de seguir insistiendo con la actividad física, así como evitar el alcohol o tabaco.
“Estas terribles consecuencias se pueden prevenir al mejorar nuestra alimentación y hacer algún tipo actividad física diariamente. Podemos comenzar por reducir el consumo de alimentos superprocesados, harinas, grasas y azúcares y evitar o al menos moderar el consumo de tabaco y alcohol. En cuanto al ejercicio, se puede caminar, bailar, nadar o valerse de aplicaciones para ejercitarse en casa.
En tanto, en referencia a la correlación que se está desarrollando entre el COVID y la diabetes, el médico recomendó a las personas con este padecimiento vacunarse. Aseguró que hasta el momento no existe ninguna contraindicación médica por afectaciones a la salud.
“Hay que vacunarse, la vacuna es segura. Los pacientes con diabetes son de primera línea, corren el riesgo de sufrir cuadros severos de coronavirus, en caso de contagio”, adviritió.
Finalmente, explicó que el miedo a la vacuna lo que provoca es que el virus se fortalezca y siga afectando a las dinámicas sociales, por lo cual, instó a la inmunización, especialmente si se padece alguna enfermedad crónica.