El mandatario celebró algunas reducciones significativas en la criminalidad durante su administración, pero, reconoció que el problema de la extorsión sigue siendo un área crítica que requiere mayor atención y esfuerzos para su control.
El presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció durante una conferencia de prensa que la extorsión es un área en la que su gobierno ha tenido dificultades para reducir los índices delictivos. Afirmó que, a pesar de lograr disminuciones significativas en otros delitos graves como el secuestro y el robo de vehículos, la extorsión sigue siendo una "asignatura pendiente".
El mandatario celebró algunas reducciones significativas en la criminalidad durante su administración, pero, reconoció que el problema de la extorsión sigue siendo un área crítica que requiere mayor atención y esfuerzos para su control.
Pese a los buenos resultados que presumió, López Obrador aceptó que hay delitos que dañan a la sociedad y la siguen afectando.
"Y que nos están costando trabajo y nos estamos ocupando desde hace tiempo en controlarlos, básicamente en lo que tiene que ver con extorsión. Yo les puedo adelantar que, en todos los delitos, en todos, ha habido disminución, lo que más nos ha costado, pero ha habido disminución son los homicidios, de cuando llegamos a la fecha”.
Sin embargo, destacó algunos logros de su administración, como el combate al huachicol (robo de combustible), del cual aseguró que el ahorro de 330 mil millones de pesos permitió financiar proyectos como la refinería de Dos Bocas y la compra de una refinería en Houston.
También mencionó los esfuerzos del Servicio de Administración Tributaria (SAT) para recuperar impuestos de grandes contribuyentes, alcanzando una suma considerable de 3 billones de pesos.
A pesar de estos avances, el presidente admitió que ciertos delitos siguen afectando a la sociedad y representan un desafío continuo para su gobierno. Destacó que los homicidios también han disminuido desde el inicio de su mandato.