Las elecciones de este domingo en seis estados derivaron en una mayor expansión territorial de Morena.
De las seis entidades que acudieron a las urnas, cuatro estaban gobernadas por el PAN —Aguascalientes, Durango, Quintana Roo Tamaulipas— y las otras dos estaban bajo gobiernos del PRI —Hidalgo y Oaxaca—.
Si bien los actuales gobernadores de Durango y Quintana Roo, José Rosas Aispuro y Carlos Joaquín, respectivamente, llegaron al poder bajo alianzas PAN-PRD, éstos se terminaron alineando al blanquiazul.
Con los resultados de las elecciones de este año, basados en los conteos rápidos del Instituto Nacional Electoral Morena (INE), Morena se quedará con cuatro entidades, mientras que la oposición, solo dos.
Morena triunfó en Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas, con sus candidatos Julio Menchaca, Salomón Jara, Mara Lezama y Américo Villarreal.
En tanto, la alianza PAN-PRI-PRD ganó en dos entidades: Aguascalientes y Durango. En la primera entidad, la abanderada fue Teresa Jiménez, quien es de filiación panista, y en el segundo estado, el candidato fue el priista Esteban Villegas, de forma que puede considerarse que el PAN se quedó un estado y el PRI, otro.
Con el reacomodo que significaron las elecciones de este domingo, Morena gobernará 21 de las 32 entidades del país; además, un estado más está bajo un partido aliado, San Luis Potosí con su gobierno del Partido Verde.
Los 10 estados restantes están divididos: cinco son del PAN, tres del PRI y dos de Movimiento Ciudadano.
El próximo año, Coahuila y el Estado de México, dos de las entidades gobernadas por el PRI, acudirán a las urnas.