"La soldada, el soldado, las Fuerzas Armadas son pueblo uniformado", afirmó Sheinbaum, destacando que esto no solo es un orgullo sino una fortuna para la nación.
La presidenta electa Claudia Sheinbaum prometió este martes que no usará a las Fuerzas Armadas para violar derechos humanos, aunque mantendrá la política de su predecesor, Andrés Manuel López Obrador, de asignarles tareas previamente reservadas a civiles.
En un discurso pronunciado en el Heroico Colegio Militar en Ciudad de México, Sheinbaum aseguró que, desde su profundo respeto por las Fuerzas Armadas y su origen humanista, nunca emitirá una orden que vulnere el orden constitucional o los derechos humanos de la ciudadanía.
Sheinbaum, quien asumirá el cargo el 1 de octubre, detalló que continuará con la política de López Obrador, que incluyó la asignación de tareas militares en seguridad pública, construcción de infraestructura, administración de aduanas y puertos, y dirección de empresas del Estado, como el Tren Maya.
En particular, Sheinbaum destacó la consolidación de la Guardia Nacional bajo la Secretaría de la Defensa Nacional, un cuerpo creado en 2019 con la promesa de ser civil.
"Fortaleceremos la Guardia Nacional como parte de la Secretaría de la Defensa Nacional y los convocaré para seguir apoyando en la construcción de grandes proyectos estratégicos, como los trenes de pasajeros hacia el norte del país y los nuevos puertos. Serán tiempos de hazañas pacíficas", afirmó la próxima mandataria.
Durante el evento, al que también asistieron el presidente saliente Andrés Manuel López Obrador, el próximo titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Ricardo Trevilla Trejo, y el almirante Raymundo Pedro Morales, Sheinbaum subrayó el papel histórico de las Fuerzas Armadas en México.
Recordó la lucha de independencia, la guerra de reforma y la revolución de 1910 como parte del "origen popular" del Ejército.
"La soldada, el soldado, las Fuerzas Armadas son pueblo uniformado", afirmó Sheinbaum, destacando que esto no solo es un orgullo sino una fortuna para la nación.
La presidenta electa también elogió la lealtad de los militares y marinos al "proyecto de transformación" de López Obrador, y su obediencia al mando civil.
El evento reflejó la continuidad en la política de seguridad y defensa en México, y el compromiso de la próxima administración con una integración más profunda de las Fuerzas Armadas en diversas áreas del gobierno.