El Gobierno de México denunció este martes el hostigamiento a su embajada y residencia oficial en Bolivia.
"Cuerpos de seguridad e inteligencia bolivianos continúan rodeando ambos recintos de México en La Paz, contrario a lo que han declarado funcionarios de ese país", indicó la Secretaría de Relaciones Exteriores en un comunicado.
Detalló que existe un cerco policial que registra el movimiento de las personas que entran y salen de los recintos diplomáticos mexicanos.
"Agentes realizan grabaciones y han intentado detener el libre tránsito de la embajadora de México y del personal diplomático, mientras que oficiales motorizados siguen los desplazamientos de vehículos oficiales", añadió.
Por ello, el Gobierno mexicano exigió a Bolivia "cumplir con sus obligaciones internacionales, garantizar la inviolabilidad de las misiones diplomáticas y cesar la política de hostigamiento y amedrentamiento".
También, México responsabilizó al país sudamericano por cualquier afectación a la sede diplomática, a su personal acreditado y a toda persona que se encuentre bajo la protección del Estado mexicano en ese territorio.
"Es evidente que estas acciones no corresponden a las prácticas habituales de vigilancia y protección de los inmuebles diplomáticos, basadas en las normas que regulan la buena convivencia entre las naciones, y sólo se pueden explicar a la luz de la situación política interna por la que atraviesa ese país".
Más temprano este martes, la policía de Bolivia demandó la entrega de "las personas refugiadas" en la embajada de México en ese país, ya que "tienen que responder ante la justicia".
El comandante departamental de la policía de La Paz, William Cordero, afirmó que sus elementos no acosan a los exfuncionarios del depuesto presidente Evo Morales ni a los funcionarios diplomáticos mexicanos.
"Más bien ellos (los funcionarios mexicanos) deberían colaborar con la justicia boliviana y entregar a las personas que se refugian al interior", declaró a la Agencia Boliviana de Información (ABI).
En la sede diplomática mexicana se encuentran nueve funcionarios del gobierno que encabezó Evo Morales hasta el 10 de noviembre.