La “productiva” visita del canciller ruso a México confirma las buenas relaciones entre ambos países, que se concretarán en medidas económicas y sociales a lo largo del año. Serguéi Lavrov se ha entrevistado con su homólogo mexicano, Marcelo Ebrard, y en la rueda de prensa posterior ha informado de que la comisión económica detenida desde 2011 se reanudará de nuevo. “Estamos esperando las propuestas de México para ver dónde pueden las empresas rusas contribuir de forma útil”, ha dicho. Además, ha manifestado la intención de ambos países de fortalecer vínculos en todos los ámbitos y al “más alto nivel”, incluida la lucha contra el narcotráfico.
Las relaciones de Rusia y México celebran ya 130 años de intercambio diplomático y la colaboración quiere relanzarse ahora, también en el orden ciudadano. El ministro de Exteriores ruso ha anunciado este jueves que se flexibilizarán los visados para aumentar el flujo de visitantes. “El número de turistas rusos en México se ha incrementado y ahora con los visados será aún mejor”, ha dicho. Ha hablado de becas para estudiantes y de renovar la comisión para asuntos educativos, culturales, deportivos. Prácticamente ha mencionado todos los sectores productivos. “A Rusia le interesa que América Latina y el Caribe sigan siendo un centro importante del orden mundial”, ha dicho Lavrov, tras recordar que México es, después de Brasil, su segundo socio en la región .
El intercambio comercial entre México y Rusia es cercano a los 2.000 millones de dólares al año. A nivel mundial, Rusia ocupa el puesto 46 entre los países con inversiones en México. A cambio, importantes empresas mexicanas tienen proyectos de inversión a largo plazo en ese mercado, ha comunicado la Secretaria de Relaciones Exteriores mexicana .
La visita del jefe de la diplomacia rusa comenzó el miércoles en Cuba y finaliza este viernes en Venezuela, donde le recibirá el presidente, en un gesto que se interpreta como un apoyo explícito al Gobierno de Nicolás Maduro. Preguntado sobre ello, Lavrov ha asegurado que su enfoque es común con México, de respeto a la soberanía de aquel país y su compromiso de no intervención. Solo medidas pacíficas. El canciller se ha ceñido a las reglas internacionales de no injerencia entre países y abogó por “el diálogo entre el Gobierno y la oposición”. “No vemos más medida de apoyo al Gobierno legítimo de Venezuela que mantener los lazos económicos”.
Apenas 24 horas antes, el líder de la oposición venezolana, Juan Guaidó, había recibido un caluroso apoyo de Donald Trump en la Casa Blanca. “Solo los venezolanos pueden resolver sus problemas”, ha repetido Lavrov, aunque se ha comprometido a ayudarlos en ese camino así como ha denunciado “los intentos para provocar la intervención por la fuerza”. “El diálogo debe ser sin condiciones previas, una postura que compartimos con México”, ha afirmado. “No se trata solo de Venezuela, los principios de la Organización Internacional del Comercio están socavados por la Administración estadounidense”. Y ha acusado a Estados Unidos de pretender que todo el mundo occidental le concierne de forma exclusiva. “Deben trabajar de forma multilateral”, ha sugerido.
De vuelta a los asuntos mexicanos, Lavrov ha mencionado las “buenas perspectivas energéticas" y la colaboración en “la construcción, barcos, farmacia, ferrocarriles, agricultura” y avances en el terreno “técnico militar”. Para sellar todas estas buenas perspectivas, los rusos mandarán una buena representación de su país al festival cervantino de Guanajuato que se celebrará en octubre. Y Marcelo Ebrard también ha sido invitado a visitar Rusia.
México ya ha recibido el apoyo de todos los países de América Latina y el Caribe para formar parte del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. ¿Está Rusia dispuesta a prestar su apoyo? “Es líder de la región y tiene una muy buena reputación en sus enfoques internacionales y sobre la no proliferación de armas nucleares. Nada se interpone para que sea apoyada la candidatura de México para 2021-22. Cooperaremos de forma estrecha”.
La visita a América Latina del ministro ruso, que viene precedida por algunas reuniones en los organismos internacionales, refuerza los tradicionales lazos con esta región, que Lavrov ha defendido apelando a “la dignidad instintiva de los países de la región tras su independencia”, al tiempo que ha rechazado los “cuentos de hadas” de quienes acusan a Rusia de estar detrás de las crisis de América Latina. “Se necesita un análisis más serio. Rusia no hace amigos para ir contra otros” y ha acusado a Estados Unidos de tratar siempre “de poner en contra de Rusia a todos los interlocutores con chantajes y presiones”.