Un atípico movimiento telúrico fue reportado en Mentone, Texas, durante la madrugada del 8 de noviembre, provocando alarma entre los pobladores de urbes ubicadas en ambos lados de la frontera.
An earthquake of magnitude 5.2 shook west Texas at 4:30 am CT, it is the strongest quake in Texas since another 5.2 in the same area last December.
— Brad Sowder (@TheBradSowder) November 8, 2023
De acuerdo con el Servicio Geológico de Estados Unidos, el epicentro estaría ubicado cerca de los campos petroleros localizados en la ciudad texana, tuvo una magnitud 5.2 y se originó a 8 kilómetros de profundidad.
El mismo movimiento, registrado a las 4:27 horas, fue detectado por el Servicio Sismológico Nacional que, sin embargo, calculó una magnitud aproximada de 5.8 y cuyo epicentro estaría a 230 kilómetros de Ojinaga, Chihuahua.
Preliminar: SISMO Magnitud 5.8 Loc 230 km al NORTE de MANUEL OJINAGA, CHIH 08/11/23 04:27:51 Lat 31.60 Lon -103.97 Pf 10 km pic.twitter.com/E9jPrluckc
— Sismologico Nacional (@SismologicoMX) November 8, 2023
El fenómeno despertó a los habitantes de ciudades de la región como Juárez y El Paso, quienes publicaron en redes sociales sus primeras impresiones sobre el suceso, que no dejó víctimas o daños materiales.
Los movimientos telúricos son muy raros en la región fronteriza entre Chihuahua y Texas. En diciembre del año pasado se presentó un sismo de la misma intensidad y en el mismo lugar.
“¡Qué manera de despertar! De acuerdo con el Servicio Geológico de Estados Unidos, un sismo de magnitud 5.2 acaba de golpear el oeste de Texas, y pudo sentirse desde Alpine a Odessa. El epicentro se localiza cerca de Mentone, donde se sabe que la inyección de petróleo en algunos pozos ha provocado movimientos similares”, refirió el periodista local Matt Stringer en su cuenta de X.
Aunque no hay pruebas que se relacionen directamente a la actividad petrolera con los sismos, algunos geólogos estiman que la prospección a grandes profundidades o actividades como el fracking deben estudiarse más.