El presidente, Andrés Manuel López Obrador, informó que luego de 150 horas continuas de trabajos exhaustivos, la noche del jueves se encontró el cuerpo del último minero que se encontraba atrapado tras el derrumbe de una mina en Múzquiz, Coahuila; por lo que envió su pésame a los familiares de los siete trabajadores.
“Se logró rescatar a los siete mineros que quedaron atrapados en una mina en Múzquiz Coahuila, un accidente, se rompió una represa, quedaron atrapados, desde hace ocho días dimos instrucciones para que se trasladara además de la Guardia Nacional, elementos de la Defensa Nacional, la secretaria del trabajo, la directora de Protección Civil, la secretaria de Economía, se trabajaron 150 horas para el rescate”, señaló.
“Enviamos de nuevo nuestro pésame a los familiares. Rosa Icela Rodríguez (secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana) estuvo a cargo de esta acción, el secretario General Luis Cresencio Sandoval (titular de la Sedena) porque se actuó pronto y con muchos elementos, desde luego buscando encontrar con vida a los mineros. Se trabajó de manera coordinada con las autoridades locales de Coahuila, tanto del municipio de Múzquiz, como con el gobierno de Coahuila”, aseveró.
Durante su tradicional conferencia mañanera en Palacio Nacional, el Jefe del Ejecutivo destacó la labor coordinada de los tres órdenes de gobierno para rescatar a los trabajadores con vida, aunque esto no fue posible.
Destacó que desde que se conoció el derrumbe, las secretarias de Economía, Tatiana Clouthier, y del Trabajo, Luisa María Alcalde, así como Laura Velázquez Alzúa, coordinadora nacional de Protección Civil; se trasladaron al lugar para coordinar los trabajos de rescate.
Señaló que ahora inicia la etapa de investigación para determinar en qué condiciones operaba la mina Miracán y si cumplía con las medidas de seguridad, pero -advirtió- siempre que hay una tragedia, hay mucha grilla “y no les importa el dolor de la gente, sino lo que buscan es sacar raja”.
López Obrador aseguró que no se repetirán casos como el de la mina de Pasta de Conchos (ocurrido el 19 de febrero de 2006 y en donde murieron 63 trabajadores) al que su gobierno está destinando 2,000 millones de pesos para el rescate de los cuerpos, lo cual está a cargo de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Insistió que su gobierno es distinto, por lo que se seguirá supervisando que no haya abusos y se proteja a los trabajadores.
“Ahora se gobierna para el pueblo, para la gente, no es como antes cuando en Coahuila dominaba una familia y un gran empresario. Eran los que dominaban y hacían lo que querían. Antes los empresarios eran los que dominaban pero ahora es distinto. Vamos a que se continúe con la revisión, que no haya abusos, que se proteja a los trabajadores, que haya supervisión, la no repetición de estos casos, pero ahora lo que nos importaba más era el rescate de los mineros atrapados”, apuntó.
“Ahora lo que nos importaba más era el rescate de los mineros atrapados. Ya viene otra etapa, esto tiene que ver hasta con lo judicial y se tiene que llevar a cabo la investigación del por qué el derrumbe. Si la mina estaba en condiciones para trabajar o no, pero eso es la etapa que viene”, aseguró.
Durante su participación en la conferencia mañanera de este viernes, la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Isela Rodriguez, informó que anoche se recuperó el último de los cuerpos de los mineros atrapados y resaltó que esto se logró gracias al trabajo de coordinación con las autoridades municipales y estatales.
Por su parte, el secretario de la Defensa Nacional, el General Luis Cresencio Sandoval, detalló que participaron 166 elementos de las fuerzas federales, de los cuales 145 son del Ejército y 21 de la Guardia Nacional.
Posteriormente, Laura Velázquez Alzúa, coordinadora nacional de Protección Civil, y Luisa María Alcalde Luján, secretaria del Trabajo y Previsión Social; realizaron un enlace hasta Múzquiz, Coahuila en donde,detallaron los trabajos de rescate.