Durante la “Mañanera del Pueblo”, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, condenó enérgicamente el asesinato de Carlos Manzo, alcalde de Uruapan, Michoacán, ocurrido este 3 de noviembre de 2025.
La mandataria calificó el crimen como un “hecho condenable, cobarde y vil”, y afirmó que no habrá impunidad. Aseguró que las autoridades federales y la Fiscalía de Michoacán ya realizan investigaciones para capturar a los responsables.
“Estamos haciendo todas las investigaciones necesarias. No habrá impunidad, llegaremos hasta los autores materiales e intelectuales”, declaró la presidenta.
Seguridad federal asume control de la investigación
El Gabinete de Seguridad se reunió de emergencia para atender el caso. En la conferencia participaron el secretario de la Defensa Nacional, Ricardo Trevilla Trejo; el titular de la SSPC, Omar García Harfuch; y el comandante de la Guardia Nacional, Hernán Cortés, quienes informaron sobre los avances preliminares del operativo desplegado en Michoacán.
Sheinbaum confirmó que una persona fue abatida durante los hechos y que ya se realizaron varias detenciones relacionadas con el homicidio.
“No habrá impunidad”: mensaje de la presidenta
La presidenta reiteró su compromiso con la estrategia nacional de seguridad, basada en cuatro ejes fundamentales:
- Atención a las causas sociales que generan la violencia.
 - Fortalecimiento de la Guardia Nacional.
 - Uso de inteligencia e investigación para el combate al crimen.
 - Coordinación entre corporaciones estatales, municipales y la FGR.
 
Asimismo, rechazó los llamados a una intervención militar extranjera, subrayando que la violencia no se resolverá con represión, sino con justicia social y reconstrucción del tejido comunitario.
Crítica a la oposición y llamado a la unidad nacional
Sheinbaum respondió a los señalamientos de la oposición, acusándolos de “usar políticamente el homicidio” del alcalde sin mostrar empatía hacia su familia.
“Hay quienes se comportan como buitres, se cuelgan del dolor ajeno sin siquiera expresar condolencias”, afirmó.
Finalmente, la presidenta reafirmó que su gobierno no permitirá que el crimen organizado socave la democracia local, y que el camino hacia la paz es la justicia social, no la guerra.