La Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, destacó los beneficios del Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) para las economías de los tres países. Aseguró que la colaboración regional es clave para fortalecer a Norteamérica como una región competitiva y preparada para el futuro.
El T-MEC, clave para la estabilidad y el desarrollo económico
Sheinbaum resaltó que el T-MEC representa un acuerdo de gran importancia para las economías de los tres países, ya que fomenta la estabilidad y la competitividad. En su conferencia matutina, mencionó que tanto México, como Estados Unidos y Canadá, se benefician mutuamente de este acuerdo, que contribuye a la estabilidad regional.
Impacto negativo de los aranceles en las economías de los tres países
En su mensaje, la Presidenta señaló que un posible aumento de aranceles propuesto por la próxima administración de Estados Unidos podría afectar no solo a México, sino también a Canadá y las empresas estadounidenses. Resaltó que el sector privado de México y su Gobierno están unidos en su esfuerzo por evitar esta medida.
Plan México: fortaleciendo la inversión y las cadenas productivas
Sheinbaum presentó el Plan México, que incluye acciones como la creación del Consejo Asesor de Desarrollo Económico Regional y Relocalización (CADERR). Este plan tiene como objetivo fortalecer las cadenas productivas en México, incentivando la inversión privada sin afectar el medio ambiente y buscando el bienestar de los mexicanos.
Propuesta de México para una región más fuerte y competitiva
Por su parte, el Secretario de Economía, Marcelo Ebrard, explicó que México propone una región unida que aproveche las oportunidades del comercio intrarregional entre México, Estados Unidos y Canadá. El comercio entre los tres países, que alcanzó 1,776.5 billones de dólares en 2023, representa el 30% del PIB mundial, lo que resalta la importancia de la cooperación regional.
Impacto de los aranceles en la industria automotriz y el empleo en EE.UU.
Ebrard también detalló los efectos negativos de un posible arancel del 25% a los productos de México y Canadá, especialmente en la industria automotriz. Las principales empresas estadounidenses como General Motors, Ford y Stellantis se verían gravemente afectadas, con un aumento de precios y una posible pérdida de 400,000 empleos en Estados Unidos.
Este enfoque de trabajo conjunto, sin divisiones, y el fortalecimiento de la competitividad regional son fundamentales para un futuro próspero para México, Estados Unidos y Canadá.