Estos cierres son parte de un dispositivo del gobierno municipal destinado a prevenir la instalación de ambulantes en estas áreas.
La directora de Control de Tránsito, María del Rayo Ramírez Polo, anunció el refuerzo de los operativos viales en Puebla para mitigar los cuellos de botella causados por los cierres en las calles 6, 8 y 10 Oriente-Poniente del Centro Histórico.
Estos cierres son parte de un dispositivo del gobierno municipal destinado a prevenir la instalación de ambulantes en estas áreas.
En una entrevista, Ramírez Polo explicó que la reapertura de las vialidades afectadas sigue en evaluación y dependerá de las decisiones de la Secretaría de Gobernación Municipal.
Sin embargo, se ha decidido reabrir las calles 4 Oriente-Poniente y 5 Norte para facilitar un flujo vehicular más ágil, ya que las calles 2 y 4 Oriente-Poniente son cruciales para el desahogo del tráfico en el corazón de la ciudad.
“Los cierres en las calles 6, 8 y 10 significan que los vehículos deben realizar un circuito más amplio. A pesar de los inconvenientes, las calles 2 y 4 Oriente-Poniente ayudan a mantener el tráfico en movimiento”, afirmó Ramírez Polo.
La directora también señaló que, durante los cierres en la avenida Reforma, las calles 2 y 4 Oriente-Poniente son vitales para mantener el flujo vehicular. Además, se están realizando ajustes en los cortes de circulación durante las horas pico para evitar congestiones innecesarias.
Para prevenir cuellos de botella, se ha asignado personal en las vialidades cerradas. “Las decisiones sobre la apertura de estas calles están sujetas a las indicaciones de la Secretaría de Gobernación”, añadió.
Finalmente, Ramírez Polo mencionó que también se está supervisando la zona de San José, específicamente en la 2 Norte entre la 22 y la 18 Oriente, debido a problemas de congestión causados por conductores que estacionan en doble fila para carga y descarga, lo que exacerba el congestionamiento en esta área.