La visita de Ibai Llanos a México dejó mucho más que fotos, streams y encuentros con creadores de contenido.
El streamer español, uno de los más influyentes del mundo digital, terminó metiéndose de lleno en uno de los temas más sensibles del futbol mexicano. Y como era de esperarse, las redes sociales no tardaron en explotar.
Durante varias apariciones públicas, Ibai dejó claro que no solo domina el mundo del streaming y los esports, sino que también está bastante enterado de la cultura popular mexicana, incluida la Liga MX. Su conocimiento llamó la atención, sobre todo cuando empezó a manejar expresiones y referencias que suelen escucharse solo entre aficionados locales.
El punto de quiebre llegó en una charla relajada, pero que terminó siendo totalmente viral.
¿Qué significa “cruzazulear”? La respuesta que desató polémica
En una dinámica de preguntas con la streamer mexicana Samy Rivers, se tocaron frases muy conocidas en México como “me dio el mal del puerco” o “quiero echarme un coyotito”. Todo iba en tono ligero, hasta que apareció la pregunta clave: ¿qué es cruzazulear?
Sin pensarlo demasiado, Ibai respondió de forma directa: “Cruzazulear es pechofriar”. La frase se propagó de inmediato en redes, generando risas, enojo y debates intensos entre aficionados de Cruz Azul. Para muchos, fue una definición brutal pero honesta; para otros, una falta de respeto al club.
Ibai incluso amplió su explicación señalando que, a nivel internacional, Cruz Azul es visto como un equipo que falla en momentos importantes, reforzando esa etiqueta que ha perseguido al club durante décadas.
De meme local a concepto global del futbol
El término “cruzazulear” nació de las constantes derrotas del equipo en finales y liguillas, especialmente antes de romper su larga sequía de títulos en 2021. Aunque el campeonato ayudó a aliviar esa carga, la palabra ya estaba profundamente instalada en la cultura futbolera.
Tras la polémica, Ibai trató de matizar sus declaraciones, aclarando que no tiene nada en contra de Cruz Azul y que su comentario iba más por el lado cultural que por un ataque directo. Sin embargo, el daño —o el impacto— ya estaba hecho.
El episodio confirmó algo claro: “cruzazulear” dejó de ser un término exclusivo del futbol mexicano para convertirse en una referencia entendida incluso fuera del país. Y una vez más, quedó demostrado que cuando el futbol y las redes se cruzan, la conversación está garantizada.