El fiscal de París está investigando las acusaciones de que la líder nacionalista Marine Le Pen y varios miembros de su partido malversaron cientos de miles de euros de fondos de la Unión Europea entre 2004 y 2017 cuando era miembro del Parlamento Europeo, cuando faltaba solo una semana para que ella se encuentra en la ronda final de las elecciones presidenciales francesas.
La oficina del fiscal dijo que recibió un informe que detalla el presunto abuso de fondos de la oficina europea antifraude OLAF el 11 de marzo y lo está revisando.
El abogado de Le Pen, Rodolphe Bosselut, negó haber actuado mal en una entrevista con BFM TV. Un portavoz de Le Pen no pudo comentar de inmediato. El medio de investigación francés Mediapart reveló por primera vez la existencia del informe de la OLAF el sábado.
Le Pen se enfrentará al presidente Emmanuel Macron en la segunda vuelta de las elecciones del 24 de abril.
Según Mediapart, varios gastos políticos reclamados por Le Pen y otros miembros de su partido eran “ficticios”. Incluyen equipo promocional para una conferencia en 2014, pagos a varios contratistas y organizaciones, compras personales de vino y financiamiento para otros eventos del partido no relacionados con las responsabilidades parlamentarias.
Le Pen personalmente sería responsable de unos 137 mil euros (148 mil dólares) y su padre, Jean-Marie Le Pen, de unos 303 mil euros, según Mediapart. El importe total de la supuesta defraudación supera los 617 mil euros.
Un portavoz de la OLAF dijo que la agencia finalizó su investigación en septiembre de 2021 con recomendaciones y envió su informe final al Parlamento Europeo y a las autoridades judiciales francesas y belgas. La investigación involucró a varias personas, tanto personas físicas como operadores económicos. El portavoz agregó que “la OLAF no hace públicos los informes finales de los casos”.
Las encuestas apuntan a una victoria de Macron en la segunda vuelta electoral final el 24 de abril, y la brecha entre él y Le Pen se ha ampliado durante la semana pasada, según una compilación de encuestas. Pero aún es probable que sea una contienda mucho más reñida que en las elecciones de 2017, cuando Macron la derrotó por más de 30 puntos porcentuales.