“Rechazo las medidas oportunistas de Estados Unidos contra funcionarios del ministerio del Interior (Minint) y de las Tropas de Prevención de las Fuerzas Armadas. Tales medidas reflejan dobles raseros de un gobierno acostumbrado a la manipulación y la mentira para mantener el bloqueo contra Cuba”, escribió Rodríguez en su cuenta en Twitter.
Pocas horas antes, el departamento del Tesoro de Estados Unidos congeló las propiedades que tengan Romárico Vidal Sotomayor y Pedro Orlando Martínez, ambos del Minint, en su país; también prohibió cualquier transacción estadunidense con ellos.
La misma sanción incluyó a los llamados “Boinas rojas” de las fuerzas armadas, especie de policía militar. El general Vidal Sotomayor es jefe de la dirección política del Minint, y Martínez encabeza la dirección política de la policía cubana.
Esta es la tercera ocasión en que la administración del presidente Joe Biden sanciona a funcionarios cubanos después de las manifestaciones registradas en unas 30 localidades de la isla los días 11 y 12 de julio pasado.
Con similares argumentos, Estados Unidos sancionó antes al ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, general de tres estrellas, Álvaro López Miera, y a la Brigada Especial Nacional de la policía.
“La acción de hoy pone en el punto de mira a otros responsables de reprimir los llamamientos del pueblo cubano a la libertad y al respeto de los derechos humanos”, dijo al anunciar las sanciones Andrea M. Gacki, del departamento del Tesoro de EUA.
El presidente Biden afirmó hace pocos días que observa de cerca los acontecimientos en la isla y pidió la liberación de los manifestantes detenidos, al tiempo que trata de garantizar el acceso amplio de los cubanos a Internet para eludir el apagón digital que ocurrió en el país caribeño durante y después de las manifestaciones.
Por su parte la web oficial Cubadebate dijo el viernes que “las autoridades cubanas consideran esas sanciones irrelevantes desde el punto de vista práctico (ninguno de esos funcionarios tiene propiedades en Estados Unidos), pero políticamente sí tienen implicaciones porque son parte de la escalada agresiva impulsada desde Washington, que incluso ha presionado a terceros países para que se pronuncien contra Cuba”