En la madrugada del 20 de octubre de 2023, la Cámara de Diputados tomo una decisión importante que afecta directamente a los ahorradores mexicanos, en la Iniciativa de Ley de Ingresos de la Federación (LIF), se acordó el cambio en la carga fiscal de quienes ahorran.
Esta fue la aprobación de una retención de Impuesto Sobre la Renta (ISR) a los intereses reales de los ahorradores al 0.5 por ciento, aunque la propuesta original del Ejecutivo planteaba un incremento mucho más significativo, llevando la retención del 0.15 al 1.48% para el año 2024.
Sin embargo, los diputados optaron por reducir este aumento y lograron que la retención se mantuviera en un 0.5 por ciento, así el impacto en los ahorros será menor... aunque sí aumenta tres veces más (y no 10, como lo hubiera sido con el 1.48%).
¿Qué significa esto para los ahorradores?
En términos prácticos, este cambio implica que de cada 1,000 pesos de rendimientos generados por tus ahorros, la autoridad retendrá 5 pesos de ISR en lugar de los 14.8 pesos que originalmente se habían propuesto.
Es importante destacar que, aunque la tasa de retención aumentará en comparación con el 0.15% que se retiene actualmente, la modificación planteada originalmente habría sido 10 veces mayor.
Además, es importante recordar que el impuesto retenido puede acreditarse o disminuirse contra el ISR que se declara mensualmente al Servicio de Administración Tributaria (SAT). Esto significa que el impuesto retenido se considera un adelanto de lo que se debe pagar, lo que ayuda a evitar una doble tributación.
Esta medida contribuye a preservar los ahorros de quienes buscan construir un futuro financiero más seguro. Si bien la retención no desaparece por completo, la reducción de la carga fiscal es una buena noticia para quienes buscan ahorrar.