Tlaxcala, Tlax.- Un incendio forestal que lleva más de dos días consumiendo el cerro San Gabriel, en el municipio de Altzayanca, ha puesto a prueba la solidaridad y el coraje de la comunidad local. Decenas de voluntarios se han movilizado sin más recursos que herramientas básicas y una fuerte voluntad para contener el fuego.
La comunidad responde ante la ausencia de apoyo oficial
A pesar de la ausencia visible de personal militar, helicópteros o un plan operativo coordinado, los ciudadanos han formado brigadas espontáneas para hacer frente a la emergencia. Muchos de estos voluntarios han acudido con sus familias, mostrando un fuerte compromiso con la protección de su entorno natural.
De 20 a más de 50 voluntarios: así creció la fuerza ciudadana
Uno de los participantes relató que, tras llegar al cerro con su padre, el grupo inicial de 20 personas rápidamente se multiplicó hasta superar los 50, mientras otras brigadas también se desplegaban en distintas zonas afectadas por el incendio.
Falta de coordinación y presencia simbólica
El mismo voluntario denunció la falta de coordinación entre los equipos presentes, incluyendo a personal uniformado, quienes aparentemente se limitaron a dejar constancia de su presencia sin involucrarse activamente en el combate al fuego.
Urgente: se necesita una estrategia de atención a emergencias
La experiencia vivida en Altzayanca revela la urgente necesidad de contar con un plan claro, coordinado y eficaz para atender incendios forestales en la región, especialmente ante el aumento de estos eventos en temporada de calor.
El valor de una comunidad que no se rinde
Mientras las llamas continúan amenazando el cerro San Gabriel, la población de Altzayanca mantiene la resistencia con valentía y entrega, demostrando que el verdadero poder reside en quienes, sin buscar reconocimiento, arriesgan su seguridad por preservar los bosques.
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