El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó un decreto que impone un arancel universal del 25% al acero y aluminio. De acuerdo con datos de la Industria Nacional de Autopartes (INA), la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) y la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), los estados más afectados en México serían Coahuila, Guanajuato y Nuevo León.
Consecuencias del arancel
Según Gabriel Padilla, director general de la INA, los principales efectos negativos incluyen:
- Aumento de costos en las cadenas de suministro.
- Desaceleración del nearshoring y la inversión extranjera.
- Caída de exportaciones y menor participación de la industria automotriz en el PIB manufacturero.
- Riesgos para el empleo en México y EE. UU.
- Distorsión del T-MEC y pérdida de competitividad frente a Europa y Asia.
Padilla destacó que el impacto de estos aranceles en la industria automotriz mexicana representaría una reducción del 1.5% del PIB manufacturero en este sector. Además, advirtió que el costo del arancel difícilmente podría ser absorbido por la manufactura mexicana, lo que derivaría en un incremento de hasta 3 mil dólares en el precio de autos nuevos en EE. UU.
Estados más afectados
El director de la INA informó que Coahuila lidera la producción nacional de autopartes con 16,748 millones de dólares, registrando un incremento del 1.51% en 2023. Este estado es clave en la producción de acero en México, con empresas como Altos Hornos de México (AHMSA) en Monclova.
En segundo lugar está Guanajuato, con 15,576 millones de dólares en producción. Silao y León destacan como centros de fabricación de autopartes, con plantas de General Motors, Honda y Mazda.
Nuevo León ocupa el tercer puesto, con 14,416 millones de dólares. Monterrey es un centro industrial clave, con presencia de la empresa Ternium México, una de las principales productoras de acero del país.
Otros estados con una fuerte producción de autopartes son:
- Chihuahua (8.7%)
- Querétaro (7.9%)
- San Luis Potosí (7.1%)
- Puebla (6.7%)
- Estado de México (6.3%)
- Aguascalientes (4.4%)
- Tamaulipas (4.2%)
El impacto de estos aranceles podría afectar gravemente la competitividad de la industria automotriz mexicana y su integración con el mercado estadounidense, poniendo en riesgo miles de empleos y la estabilidad del sector en la región.