Tlaxcala, Tlax.- A tan solo nueve meses del inicio de la administración de Ázain Ávalos Marbán al frente del municipio de Apetatitlán, el descontento entre la población va en aumento debido a presuntos actos de corrupción, desorganización administrativa y un grave abandono de los servicios públicos.
Críticas por falta de avances y presuntos favoritismos
Diversos sectores de la ciudadanía señalan un nulo avance en obras públicas y una percepción de impunidad dentro del ayuntamiento. Los señalamientos incluyen acusaciones sobre favoritismos, la designación de funcionarios sin preparación y un ambiente laboral hostil e inestable.
Fallas graves en áreas clave del gobierno municipal
Los ciudadanos han expresado su decepción por la falta de resultados en temas prioritarios como:
- Seguridad pública
- Infraestructura
- Atención ciudadana
La Policía Municipal es una de las áreas más cuestionadas, pues se acusa que opera sin los controles mínimos de confianza. Además, direcciones como Juventud, Deporte y Ecología han sido señaladas por su inoperancia y falta de proyectos reales.
Acusaciones contra funcionarios y deterioro laboral
También se denuncia que algunos asesores y funcionarios actúan con autoritarismo, como si fueran los verdaderos dueños del ayuntamiento, mientras que los trabajadores municipales enfrentan bajos salarios y condiciones indignas.
Crisis de credibilidad y decepción social
La administración de Ávalos Marbán enfrenta una profunda crisis de credibilidad, y si no se actúa con urgencia para resolver estas problemáticas, podría perder completamente su legitimidad.
La esperanza de un cambio real que prometió al inicio de su gestión se desvanece entre acusaciones, divisiones internas y el creciente desencanto ciudadano.