Tlaxcala, Tlax.- El Partido Acción Nacional (PAN) en Tlaxcala enfrenta una grave contradicción interna. Mientras que la diputada local Miriam Martínez Sánchez se opone públicamente a la Reforma Judicial desde la tribuna, su asesor Alfredo Escamilla Ricalday muestra un respaldo activo a los candidatos a jueces de distrito a través de sus redes sociales.
Incoherencia política y falta de alineación
Esta situación deja al descubierto una falta de coherencia dentro del partido, generando dudas sobre las verdaderas intenciones políticas de sus miembros. La postura pública de Martínez parece entrar en conflicto con el apoyo discreto de Escamilla Ricalday hacia ciertos candidatos judiciales, lo que refleja una clara incongruencia interna.
Intereses personales y presiones internas
Lo más preocupante es que Escamilla Ricalday, quien ya experimentó una derrota electoral en Yauhquemehcan, parece estar priorizando intereses personales sobre la línea política del PAN. Este respaldo a los candidatos judiciales podría estar vinculado a presiones internas, posiblemente relacionadas con la familia Martínez, cuya trayectoria electoral ha estado marcada por constantes fracasos.
El PAN en Tlaxcala: Conflictos de intereses
Así, el PAN en Tlaxcala no solo se enfrenta a una contradicción evidente entre sus representantes, sino que también deja al descubierto una mezcla de intereses partidistas y familiares, lo que perjudica su imagen ante la ciudadanía.